"Siempre he sentido que mi destino era, ante todo, un destino literario; es decir, que me sucederían muchas cosas malas y algunas cosas buenas. Pero siempre supe que todo eso, a la larga, se convertiría en palabras, sobre todo las malas, ya que la felicidad no necesita ser transmutada: la felicidad es su propio fin".
Jorge Luis Borges, Siete noches.
jueves, 27 de julio de 2017
27 julio 2017
¡Tras, tras! Totalmente endorreica cavaba profundo, quería consumirse en las entrañas de la tierra; el resto quería como destino el mar. ET
Amm
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