"Siempre he sentido que mi destino era, ante todo, un destino literario; es decir, que me sucederían muchas cosas malas y algunas cosas buenas. Pero siempre supe que todo eso, a la larga, se convertiría en palabras, sobre todo las malas, ya que la felicidad no necesita ser transmutada: la felicidad es su propio fin".
Jorge Luis Borges, Siete noches.
lunes, 19 de marzo de 2018
19 marzo 2018
Ya aventé las redes, pero no he querido ver la presa. Rebosante de cobardía. ET
Jejeje me gusta
ResponderEliminar👍
Eliminar