"Siempre he sentido que mi destino era, ante todo, un destino literario; es decir, que me sucederían muchas cosas malas y algunas cosas buenas. Pero siempre supe que todo eso, a la larga, se convertiría en palabras, sobre todo las malas, ya que la felicidad no necesita ser transmutada: la felicidad es su propio fin".
Jorge Luis Borges, Siete noches.
jueves, 16 de mayo de 2019
16 mayo 2019
Como rutina, tomaba café cada mañana. Había leído que el pH bajo reducía el desarrollo de molestos lepidópteros intestinales.
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